
“Si naciste pa martillo, del cielo te caen los clavos”
Creo firmemente que cada uno tiene un camino en esta vida y tiene que ver con encontrar lo que te hace vibrar, lo que de verdad llena tu vida de satisfacción y sentido.
Unos le llamarán tu misión o propósito de vida, otros le llamarán tu alma, otros el sentido de la vida o tu sabiduría interior, y otros dirán lo que Dios ha pensado para mí.
Da igual cómo le llamemos, al final es lo que de verdad te conecta con la vida y está al servicio de esta.
Para mí, es el camino que te da la oportunidad de ser tú mismo y, por tanto, te alinea con tu sabiduría, con lo que tú eres, con tu alma, tu esencia y efectivamente, tu propósito. Para mí lo que tú eres, tu esencia, es algo que está irremediablemente conectado con algo más grande y sagrado. Y cuando logras conectarte con todo eso, celebras la vida y la vida te responde, celebrándote también. Todo es más fácil, fluye, te llega lo que necesitas para desarrollar esa esencia y tu vida adquiere sentido y se llena de satisfacción y bienestar.
Tu esencia, pues, no es algo fortuito o que dependa de la suerte. Se conforma con todos los dones que has recibido de tus ancestros, sus experiencias, lo que les quedó por resolver y también la resiliencia que generaron. Es como si heredásemos una tira de ADN de lucecitas, y a ti te toca ponerlas en ON o en OFF, pero allí están esperándote.
En el momento que podemos conectar con nuestra alma, sentido de la vida, propósito, Dios, sabiduría interna….o como le llamemos, podremos decir: _ si has nacido para martillo, del cielo te caen los clavos. Sí, los clavos y lo que necesites para desarrollarte en toda tu plenitud.
El camino emerge solo cuando sois conscientes de aquello que sois y de los dones que poseéis.
Si sois propensos a esperar a que el camino se allane, a momentos mejores o a sentir que sea el camino correcto para dar el paso, entonces, sintiéndolo mucho, el camino no fluye.
Si te engañas con responsabilidades, calmantes inmediatos de tu malestar, quejas, cargas, lealtades y creencias limitantes, el camino también se estanca. Las adiciones, malos hábitos, no cuidarse ni priorizarse, calmantes como el trabajo, el poder, conseguir dinero, las obligaciones autoimpuestas, decisiones que te atan, vivir solo para tus hijos, para trabajar….y un sinfín de actitudes que hacen que escojamos un sucedáneo de vida.
Bajo mi propia experiencia y la experiencia de tantas personas que se han cruzado en mi camino, puedo afirmar que todo lo que nos aparta de nuestra esencia, nos aparta también de la satisfacción, plenitud y felicidad que podemos llegar a alcanzar.
Al final, seguir este camino o quedarse en un sucedáneo de vida, es una decisión nuestra más que algo que tenga que ver con la suerte.
Todo empieza por la intención, la ilusión, la proyección pensando creativamente. Eso genera la circunstancia y entonces el universo generará la oportunidad. La fuerza de pensamiento creativo genera y da forma a caminos nuevos que renacen y fluyen.
Más veces de las que desearíamos, un camino nos lleva a algo que no fluye. Entonces os invito a que os preguntéis:
¿Quizás porque no es el momento y antes debes hacer algo contigo?
¿Por qué de la manera que lo estás generando no corresponde a tu esencia?
¿O quizás realmente ese camino no te pertenece, no va con tu alma?
Te encanta ese camino, pero ¿te encanta quizás porque corresponde a una lealtad, una obligación, un desorden sistémico o carga que te cuesta sentir como tal?
¿Como pensar y focalizar la intención pera que se transforme en aquello que te pertenece y se alinee con tu esencia?
Con calma, sin juicio, sintiendo el cuerpo. Conectando con nuestro interior para percibir qué hace vibrar a tu corazón y qué hay que manifestar.
Quizás antes necesites liberarte de lo que tapa y oculta a todo ese tesoro interior que tenemos todos en nuestro interior.
Lo que brilla en el corazón y te hace subir la vibración, sintiéndote feliz por un momento. Es lo que os fluye fácil, en lo que el tiempo se va casi sin percibirlo y además lo disfrutáis enormemente. Y lo más importante, que eso no os pesa ni os lastra, sino que vuestro corazón se expande y lo gozáis lo sostenéis en el tiempo y sentís que ojalá podáis dedicar más tiempo a eso que es la vibración de vuestro corazón, esa es la llama que genera el camino y os va a dar amor, equilibrio, estabilidad y abundancia.
Si quieres, puedes hacer el ejercicio de conectar con tu propósito que está en el apartado de RECURSOS de la, para arrojar luz en como hacer que tu camino hacia la vida, emerja con más claridad.
Todo este tema se desarrolla en la formación sistémica, en el módulo de recursos. Si deseas más información vista la página de la FORMACIÓN SISTÉMICA.